Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto una galaxia excepcionalmente luminosa a más de 13.000 millones de años-luz de distancia de la Tierra. Hasta donde se sabe, es la más lejana.
Dado que vemos cada objeto cósmico por la luz que nos llega de ellos ahora, y que esta ha viajado tantos años como años-luz de distancia nos separan de cada objeto, la galaxia más lejana es también la más antigua de entre las observadas. Su antigüedad corresponde a cuando el universo tenía tan solo alrededor del 5 por ciento de su edad actual. Después de transcurridos tan solo 670 millones de años tras la creación del universo, esta galaxia, EGS-zs8-1, ya estaba formada.
El hallazgo es obra del equipo internacional de Pascal Oesch, Ivelina Momcheva y Pieter van Dokkum, de la Universidad Yale en New Haven, Connecticut, Estados Unidos.
EGS-zs8-1 fue identificada originalmente con arreglo a sus colores particulares, delatores del largo viaje que ha hecho la luz que ahora nos llega, y que es captada en imágenes tomadas de los telescopios espaciales Hubble y Spitzer de la NASA. Las observaciones se complementaron con otras hechas desde el Observatorio W. M. Keck, situado en la cima del Mauna Kea, Hawái, Estados Unidos.