La compañía estadounidense Space X afirmó este sábado que falló en su intento de hacer aterrizar un cohete ya usado en una barcaza estacionada en el Atlántico para ser reutilizado.
El jefe de la compañía, Elon Musk, dijo que la primera parte del cohete no tripulado llegó a la plataforma flotante de la compañía cerca de Florida, pero lo hizo con demasiada fuerza y tuvo un “aterrizaje brusco”.
Musk afirmó que los operarios de su empresa estuvieron cerca de controlar el descenso del cohete, pero no se logró el objetivo.
En días pasados la empresa Space X había dicho que los cohetes que impulsan a las naves espaciales y que eran dados de baja al primer uso, podían ser reciclados si era posible controlar su descenso a la tierra.
Después de varios intentos la semana anterior, este viernes se había logrado finalmente el lanzamiento de la Falcon 9.
La NASA contrata los servicios de esta empresa para el suministro de la Estación Espacial Internacional.